Biomedicina Siglo XXI
Faringoamigdalitis
Recomendaciones generales:
- Indica una inflamación en la faringe y el tejido linfático localizado en las vías respiratorias superiores, que puede manifestarse en forma aguda o tomar un carácter de evolución crónico.
- El tejido linfático se ubica por todo el organismo, y en las vías respiratorias superiores, lo tenemos formando un anillo de protección, representado por las amígdalas, las adenoides y una quinta “amígdala” ubicada en la raíz de la lengua.
- Estas suelen inflamarse como un mecanismo de defensa orgánica, frente a una agresión de cualquier naturaleza (bacteriana, viral, tóxica, etc), para producir células de defensa especializadas, conocidas como linfocitos.
- Los principales síntomas son ardor o dolor en garganta, a veces con dificultad para tragar alimentos sólidos o aún líquidos, tos con o sin expectoración, fiebre, malestar general e irritación de la zona, a veces con presencia de pus en amígdalas.
- Una de las principales causas es bacteriana, por la proliferación especialmente del llamado estreptococo beta hemolítico, cuya toxina podría a largo plazo y por tratamientos inadecuados, predisponer al desarrollo de la fiebre reumática.
- El hecho de que esta bacteria se vuelva patógena, es decir que cause o no enfermedad, va a depender del estado energético del paciente en un inicio y de la respuesta de sus defensas orgánicas, posteriormente.
- En un organismo lo primero que se altera, o lo primero que se corrige, es el estado energético vital, por lo que con las terapias biológicas, procuramos mejorar este nivel de energía y favorecer los normales procesos de defensa orgánica, para lograr erradicar la bacteria.
- Con el uso prolongado y a repetición de antibióticos, a veces se consigue aliviar los síntomas, pero la bacteria y su toxina, logran avanzar a tejidos más profundos, en un proceso que se conoce como vicariación progresiva, que es un avance negativo en la enfermedad.
- Es por esto que a más de una terapia biológica, conviene ayudar al organismo con algunos consejos naturales que a continuación se detallan.
- El paciente debe evitar en lo posible el humo de cigarrillo y ambientes contaminados en general.
- Cambios bruscos de temperatura, ejercen también una influencia negativa, en enfermedades respiratorias.
- Procure utilizar un pañuelo, bufanda o alguna protección, si pasa de un ambiente abrigado a uno frío.
- Sea muy selectivo en su alimentación, que las funciones vitales del organismo, se construyen en base a una buena alimentación.
- Debe evitar productos refinados, carne de cerdo, químicos en general; mientras más natural sea su alimentación, mejores resultados obtendrá en su tratamiento.
- La leche por ser producto de una especie biológica completamente diferente a la nuestra, junto al azúcar y productos refinados, congestiona de forma importante el sistema linfático, especialmente a nivel de la orofaringe, siendo en parte responsables de la mayoría de los procesos inflamatorios de amígalas y vías respiratorias altas.
- La dieta deberá ser abundante en líquidos, especialmente jugos de frutas cítricas (naranja, limón, toronja, piña, tomate de árbol, etc), frutas y verduras en forma preferente.
- La situación tóxica de en estos casos, suele ser muy alta, de allí la enorme conveniencia de realizarse en forma periódica, enemas o lavados intestinales de limpieza, lo cual descongestiona y alivia a todo el organismo, mejorando el estado general del paciente.
- Conviene consumir una buena cantidad de ajo y cebolla, que contienen sustancias antiinflamatorias y antisépticas, favoreciendo la erradicación de enfermedades respiratorias en general.
- Descanse lo suficiente (aunque no necesariamente en cama), que un cuerpo descansado se cura más rápidamente que uno en actividad.
- El ejercicio físico periódico, siempre ayuda a mejorar la vitalidad y a desintoxicar el organismo de la persona.
- Frente a molestias que inician en garganta, se puede ayudar al tratamiento con gargarismos repetidos de agua de manzanilla caliente con un poco de bicarbonato (1 cucharadita por taza).
- La sal
resulta un excelente remedio para faringes inflamadas, mejor todavía si es
sal marina, se coloca en un vaso de agua tibia una cucharadita, para hacer
gárgaras y buches después de cada comida, así sea una simple galleta que
se ha servido, igual
- Otra fórmula que también ayuda, es la naranjada caliente, o jugo de mora caliente, igualmente en gargarismos.
- Tan pronto como se recupere de la inflamación, especialmente si fue bacteriana (pus), reemplace su cepillo de dientes o sumérjalo en un vaso con agua, mezclada con agua oxigenada, para evitar una posible reinfección.
- Entréguese totalmente y de corazón, a un Poder Espiritual superior a sus fuerzas, El es su creador y el único que puede sanarle totalmente de cualquier dolencia.
- Procure recurrir a tratamientos y medicinas biológicas para cuidar su salud, ellas buscan el equilibrio físico, mental y emocional de su organismo.
Dr. Jaime Cevallos Gómez
Médico Bioenergético
*La información contenida en esta publicación, es proporcionada únicamente
con fines informativos y de orientación al público y no pueden
constituirse como recomendaciones médicas personalizadas. No deberán
seguirse bajo ningún concepto, como tratamientos médicos únicos y se
recomienda en todo caso, consultar con profesionales médicos debidamente
acreditados ante las autoridades sanitarias.
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